Música Para Leer: Anthony Burgess
A Clockwork Orange, o La naranja mecánica es una novela de Anthony Burgess, publicada en 1962. A esta obra de Burgess se le considera parte de la tradición de las novelas distópicas británicas, sucesora de trabajos como 1984 de George Orwell, y Un mundo feliz de Aldous Huxley. En 1971 fue llevada al cine por el director Stanley Kubrick.
Kubrick pidió a Wendy Carlos, compositora estadounidense de música electrónica y de las primeras intérpretes que usaron sintetizadores para la realización de sus obras, llevar a cabo el soundtrack de su filme; además, utilizó piezas de música clásica, género favorito de Alex Delarge, personaje principal de la obra; para varias secuencias de la cinta.
El soundtrack completo de la película de Kubrick es:
- Title Music from A Clockwork Orange
- Rossini: The Thieving Magpie (Abridged)
- Theme From A Clockwork Orange (Beethoviana)
- Ninth Symphony, Second Movement, Abriged
- March From A Clockwork Orange (Ninth Symphony, Fourth Movement, Abriged)
- Rossini: William Tell Overture (Abridged)
- Pomp And Circumstance March No. IV
- Pomp And Circumstance March No. I
- Timesteps (Excerpt)
- Overture to the Sun
- I Want to Marry A Lighthouse Keeper
- Rossini: William Tell Overture (Abridged)
- Suicide Scherzo (Ninth Symphony, Second Movement, Abriged)
- Ninth Symphony, Fourth Movement, Abridged
- Singin’ In The Rain
Basados precisamente en Alex, la banda de punk rock alemana Die Toten Hosen, compusieron el tema Hier kommt Alex perteneciente a su disco conceptual Ein kleines bisschen Horrorschau, Die Lieder aus Clockwork Orange und andere schmutzige Melodien, que se puede traducir como Las canciones de la Naranja Mecánica y otras sucias melodías. La mitad de los temas contenidos en este álbum fueron escritos para una adaptación teatral, a cargo de Bernd Schadewald. El disco entero está íntimamente relacionado tanto con la obra de Burgess como con la versión cinematográfica de Kubrick. Cabe destacar que en las transiciones entre canciones se escucha, al igual que en la película, fragmentos de obras de Ludwig van Beethoven, especialmente la Sinfonía nº 9.
Respecto a este material, Breiti, guitarrista de la banda, explicó:
“La Naranja Mecánica” fascinó y aún hoy sigue fascinando a mucha gente en todo el mundo. Pienso que lo hace por distintas razones: describe la vida en las ciudades modernas, la distracción por la televisión, el aburrimiento de los jóvenes, la vida con una pandilla, el consumo de drogas, el romper con ciertos tabúes, las manipulaciones por parte de las instituciones estatales, las intrigas políticas, la tentativa de los jóvenes de escaparse del mundo de los adultos y arreglarse con este mundo finalmente de cualquier manera”.
Separados por miles de kilómetros, pero unidos por el personaje de Alex Delarge, otra banda punk que dedicó uno de sus temas a la obra de Burgess, fueron los argentinos Los Violadores, quienes en 1985 lanzaron su tema Uno, dos, ultraviolento, respecto a esta pieza, Stuka, guitarrista de la agrupación, comentó:
“La estética de la naranja mecánica y especialmente la de Alex y sus drugos es completamente punk. Alex de Large es el primer punk de la historia. Creo que los Violadores vimos esto, además por supuesto, de captar la importancia de la historia crítica del libro que planteaba hasta dónde pueden llegar con tal de tenernos controlados”.
La influencia de La Naranja Mecánica en la música punk ha sido enorme, la estética de Alex Delarge, ha sido inspiración para varias bandas, cuyos integrantes salen al escenario disfrazados de “drugos o débochcas”, por ejemplo: The Adicts, banda formada en Suffolk, Inglaterra y que en 1985, lanzaron su álbum Smart Alex; en el que se encuentra la canción homónima dedicada a la figura de Alex Delarge:
Soy Jack, el asesino de gigantes
Soy tu pequeño regalo de navidad
Soy negro, soy blanco
Soy el día y la noche
Alex lo llaman Alex
Alex el niño listo… (fragmento de la canción Smart Alex)
También encontramos a los norteamericanos Lower Class Brats, agrupación formada en Austin, Texas; quienes están altamente influenciados tanto por el libro como por la película La Naranja Mecánica. Entre los temas que destacan dedicados a esta obra se encuentran: Just like clockwork y Ultra Violence:
Llegó la hora de un poco de UltraViolencia
Vamos, subamos a mi Durango 95
Conozco un lugar al que podemos ir
Todo será un verdadero show de terror. (fragmento de la canción Ultraviolence)
Y finalmente la banda japonesa Hat Trickers, quienes visten al estilo de los diferentes personajes de Clockwork Orange y que en 2003, lanzaron su disco Ultra Punk Droogs, el cual contiene el corte Nadsat, que hace referencia a la jerga lingüística inventada por Burgess, o su tema Clockwork soldiers, de su disco homónimo, de 2014.
La temática de la obra de Burgess, sobre todo lo referente a la ultra violencia, ha hecho que sean sobre todo grupos de punk, street punk y oi!, los que más se acerquen a ella para componer sus canciones.
Entre las bandas más famosas de estos géneros, podemos destacar a Ramones y su tema Durango 95, el cual hace referencia al auto que conduce Alex Delarge; o la banda Rancid con Clockwork orange, en la que hablan de la golpiza que los drugos le propinan a un vagabundo en un túnel; o bien, la agrupación Oi se arma y su corte Oi clockwork, en el que no sólo hablan de la violencia extrema que caracteriza a Alex, sino que también utilizan varias palabras en nadsat.
Los Nikis, una banda española de los 80, de los primeros en tocar pop punk, tienen entre sus temas La naranja ya no es mecánica, en el que hablan de algunas de las aventuras de Alex.
Alex, todo ha cambiado mucho,
todo ha cambiado mucho.
Ya no está de moda colchoquear.
Oh, hermanito se acabaron los delitos,
nadie compra discos de Ludwig van,
de Ludwig van.Alex, no lo intentes de nuevo,
no lo intentes de nuevo.
Deja a los mendigos vivir en paz.Ya no hay más Moloko
y todos piensan que estás loco,
la ultraviolencia siempre acaba mal,
siempre acaba mal
De los momentos determinantes en la película de Kubrick, es cuando los drugos entran en la casa de un escritor, donde lo golpean a él y a su esposa, mientras que su líder canta Singin’ in the rain; otra escena emblemática, es cuando Alex está internado y, como parte de la rehabilitación con la técnica Ludovico, lo obligan a ver escenas de ultraviolencia en una pantalla gigante, acompañada de un estímulo auditivo, la Oda a la alegría.
Paren, por favor, se los pido.
¡Es un crimen, es un crimen, es un crimen!
Usar a Ludwig van así, él no hizo daño a nadie, Beethoven sólo compuso música.
No es justo, no es justo que sienta náuseas al escuchar al divino, divino Ludwig van.
Finalmente, tenemos a Rob Zombie, y su canción Never gonna stop, en cuyo videoclip, el líder la banda aparece disfrazado como Alex Delarge y se muestran escenas en el Bar Lácteo Korova, lugar al que los drugos acudían por su bebida predilecta: Moloko vellocet, un opiáceo mezclado con leche.