¿Cómo se planea un festival (a grandes rasgos)?
1.- Los organizadores deciden el concepto que tendrá el evento, a qué audiencia quieren enamorar con él y cuánto dinero tienen para lograrlo. Un Vive Latino se basa en una idea y un presupuesto diferentes a un Nrmal o un Bahidorá, y enamoran a personas (usualmente) distintas.
2.- Escogen headliners pensando en el punto 1: ¿Qué músicos quedan con el concepto?, ¿qué le gusta a esta gente?, ¿para qué les alcanza?
3.- Buscan talento “nuevo” para terminar de llenar su convocatoria.
Y es en este punto cuando reciben desde 100 hasta más de 10,000 solicitudes de músicos que quieren tocar en sus escenarios.
¿Qué cosas sacan a tu banda de la lista?
1.- Tu música o concepto no son del corte del evento.
Aunque mandes el mejor demo y tengas una campaña publicitaria impecable, tu banda de metal progresivo difícilmente va a entrar a un festival de música electrónica.
Lógico, ¿no? Porque aún si entra, vas a tocar frente a un montón de personas a las que no les importa tu proyecto. Ya hemos hablado de esto aquí.
2.- Tu banda no está lista para ese festival.
Tienes sólo 4 o 5 canciones que están mal grabadas, tu show en vivo es aburrido y, en general, no estás a la altura de los demás grupos que compiten contigo por un lugar en el cartel.
Una organizadora del Vive Latino comentó en una conferencia que, si aceptaban a tu banda bajo estas condiciones, te hacían más daño que bien.
¿Por qué? Porque un montón de personas acostumbradas a un nivel de calidad muy alto, y envalentonadas por estar en grupo, van a oír por primera vez a tu banda cuando está desafinada y a destiempo. Luego le dan click a tus redes sociales (por curiosidad), y encuentran un proyecto que se ve amateur y está muy por debajo de sus expectativas.
¿Quieres eso?
3.- No presentaste a tu banda adecuadamente.
Tu solicitud incluye canciones en un formato diferente al que te pidieron, tu título es genérico, el texto es aburrido y largo y tu press kit se ve poco profesional.
Si puedes decir algo en 5 palabras, no lo digas en 10. Eres el correo número 140 que lee Susanita en el día: ¿Por qué te va a poner atención?, ¿por qué le interesas?, ¿qué tienes de diferente a las otras 139 solicitudes que leyó?
Vuelve a preguntarte: ¿Qué le interesa a este festival?, ¿qué concepto tiene?, ¿a qué tipo de personas quiere enamorar? Y con base en eso, diles quién eres, qué tocas y por qué les conviene meterte.
Nota: No lo formules como “les conviene meterme porque blah blah blah”, por favor. Un “hemos tocado para X personas y vendido X discos” es suficiente. Que tus acciones hablen por ti.
¿Qué puede ayudar a que les interese tu solicitud?
1.- Pule tus canciones hasta que te sientas orgulloso de ellas. Manda tus mejores grabaciones y trabaja cada día en tu show en vivo.
¿Tu proyecto podría competir con las demás bandas que van a mandar solicitud?, ¿se ve profesional?, ¿tú invertirías en él si fueras Susanita, la organizadora?
2.- Dale al festival la información que quiere. No les importa tu historia de vida, no son una revista. Quieren saber por qué les conviene meterte: ¿A qué suenas?, ¿qué vas a traer de nuevo?, ¿cuántos quieren oírte ahí?, ¿vas a ayudar a enamorar a su audiencia, si es que no te conocen?
3.- Genera prensa. Piénsalo así: Si “le suenas” a Susanita, es más probable que abra tu correo aunque ya sean las 11 de la noche.
4.- Agrega un pequeño link a una grabación o video, de calidad, que les dé una probada de a qué suenas en vivo (y cuánta gente convocas).
¿Quieres organizar tu propio festival? César grabó un podcast con consejos que puedes oír aquí.
Es difícil entrar a un festival. Disfruta el camino, aprende de él y no te desmotives.
Si te interesa llevar a más gente a tus eventos, Cheko escribió un artículo muy bueno aquí, y si te interesa comenzar a tocar en otras ciudades, tenemos algo acá.